
El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ha pedido este martes al PSOE y a Ciudadanos su apoyo para liderar un Gobierno que haga "algunas de las grandes reformas que necesita España y que quedarían para mucho tiempo", incluso acometer una reforma constitucional.
"Yo no tengo ninguna línea roja", ha llegado a decir, en una entrevista en la Cadena Cope, aparte de la soberanía nacional y la igualdad de los españoles, a las que, ha recalcado, tampoco renunciará el PSOE.
Rajoy ha llamado a "hacer de la necesidad virtud" y ha subrayado que con un Gobierno que contase con el apoyo de más de 200 diputados se daría un mensaje de credibilidad y "tranquilidad" a los mercados y además se podrían hacer "grandes reformas que se consideren necesarias" y "para muchos años", incluso una reforma constitucional.
De hecho, ha dado a entender que es con PSOE y con Ciudadanos con quien podría pactar una reforma constitucional, pero no con otros partidos: "Con 300 diputados se podría hacer otra reforma totalmente distinta, que muchos no podríamos apoyar", ha dicho.
No obstante, no ha desvelado qué le ofrecerá al líder socialista, Pedro Sánchez, cuando vuelva a reunirse con él para intentar recabar su apoyo para ser investido. Eso sí, ha dejado claro que ese Gobierno debería estar presidido por el PP, puesto que ganó las elecciones y en concreto por él mismo, que fue el candidato que se presentó.
También ha asegurado que, tenga o no asegurados los apoyos, se presentará a la investidura si así se lo encarga el Rey, porque es su "obligación" y porque es como funcionan las instituciones democráticas, aunque ahora "algunos" crean que se puede hacer "cualquier cosa".
Reelección en el PP
Por otra parte, Rajoy ha asegurado que se presentará a la reelección como líder del PP aunque no consiga volver a ser jefe del Ejecutivo. "Se produzcan los acontecimientos que se produzcan", ha dicho.
Rajoy se ha expresado así pese a haber dicho también que "adelantar acontecimientos no tiene mucho sentido" y que lo prioritario para el PP es intentar formar Gobierno y que España tenga un nuevo Ejecutivo cuanto antes.
Rajoy, que ha vuelto a descartar la hipótesis de retirarse para que el Gobierno lo presida otra persona del PP, ha recalcado que tiene un apoyo muy mayoritario de sus compañeros, tal como se vio en la última reunión del Comité Ejecutivo del PP.
Preguntado si los que le invitan a dar un paso atrás son los mismos que lo hicieron en 2008 -cuando perdió las segundas elecciones frente al socialista José Luis Rodríguez Zapatero-, ha respondido que esas cosas no le preocupan mucho porque lleva escuchándolas desde que llegó a la presidencia del PP.
Nuevas catalanas
Rajoy también ha abogado por la celebración de nuevas elecciones autonómicas en Cataluña tras confirmarse la imposibilidad de investir a Artur Mas debido al 'no' de la CUP a su oferta de Gobierno. "No me gusta que haya elecciones cada media hora, pero en este caso no queda más remedio", ha señalado.
Rajoy también ha aprovechado para pedir a Mas "que deje el independentismo" y ha asegurado que un frente de izquierdas gobernando en Cataluña no va a crear "más problemas" al Estado de los que ya generado CDC en esta última legislatura: "En todo caso, siempre han tenido al Tribunal Constitucional delante".
Preguntado por si contempla la posibilidad de un 'tamayazo' de aquí al fin de semana que acabe invistiendo a Mas, Rajoy no ha querido entrar en suposiciones y únicamente ha dicho: "Sería lo que faltaba, después de lo que hemos visto en Cataluña, como aquel famoso empate en una asamblea a 1.515 votos".