
Alberto Núñez Feijóo, presidente de Xunta de Galicia, ha admitido este jueves que en el caso de que "Pedro Sánchez fuese presidente y Pablo Iglesias vicepresidente, o al revés, habría muchas cosas que pensar y que reflexionar" con respecto a su liderazgo dentro de las filas popularesy la posibilidad de dar un paso adelante como candidato a la Presidencia.
Así lo ha reconocido esta mañana en una entrevista concedida a esradio, no sin señalar también que "los carismas son discutibles".
El dirigente gallego se ha mostrado partidario de reformar la actual ley electoral, de manera que se permita gobernar al partido que consiga el 35% de los votos, con una diferencia del segundo de cinco puntos, o bien que se plantee una segunda vuelta. "No parece razonable -ha remarcado- que quien haya conseguido el 48% de los votos no gobierne, y quienes hayan conseguido menos lo hagan". Y ahora -ha subrayado- hemos incumplido el espíritu de la ley electoral española... Hoy Adolfo Suárez no hubiera podido ser presidente, así pues creo que la experiencia nos viene a demostrar que es el momento de cambiar la ley electoral española".
El presidente gallego no ha ocultado su preocupación por el resultado de las "mareas-podemos" en las últimas elecciones celebradas en los municipios de su comunidad. Por eso "volvemos a la necesidad de un partido que tenga visión de estado". Hoy, ha dicho, "el Partido Socialista no es una alternativa de gobierno, sino un partido de la oposición dispuesto a hablar con cualquier partido para llegar al gobierno. Ahora no tenemos la oportunidad de hablar con un gran partido socialdemócrata".