
Jubilación de oro, cementerio de elefantes... la ubicación de los expresidentes de las comunidades Alberto Fabra, Pedro Sanz y María Fernanda Rudí, o de la alcaldesa Rita Barberá tras el resultado de las últimas elecciones autonómicas y municipales del 24M ha vuelto a desempolvar el rosario de críticas que supone una parte del organigrama del Senado. La Cámara Alta en la que acaban muchos políticos, y donde ningún partido se priva de conservar en formol algunos privilegios.
¿Pierden el poder? ¿Necesitan estar aforados por causas abiertas? ¿Es la compensación de favores? El Senado se ha convertido en España en una especie de cajón de sastre donde cabe todo. Sus señorías se congelan sus sueldos.
Este miércoles, el diario El Mundo se hace eco de ese refugio en el que ha devenido, casi desde su origen en la democracia, el Senado. Estos días, los socialistas han elevado el tono de voz para subrayar el cobijo que los populares han dado a sus dirigentes que han perdido las elecciones el 24M. Pero lo cierto es que tanto el PP como el PSOE han elegido el Senado para el retiro político de sus veteranos.
Solo hay que echar un vistazo a los sueldos que deja reflejados el diario El Mundo en portada. Estos son algunos de ellos, con diferentes salarios, pero también con diferentes responsabilidades. Para algunos, el Senado es sencillamente un paseo.
El acogimiento del Senado
Juan José Lucas, expresidente de Castilla y León y actualmente vicepresidente de la Cámara Alta (108.672,30). El político soriano es el que tiene mayor responsabilidad en el Senado. Es además vicepresidente primero de la Diputación Permanente en el Senado y, también vocal en tres comisiones. Su designación es autonómica, en su caso de las Cortes de CyL, pero su principal cargo viene directamente del Gobierno.
Parecido sueldo es el que percibe el socialista andaluz José Montilla (105.830.70 euros), a la sazón expresidente de la Generalitat.Tras concluir sus funciones en Cataluña, Montilla deparó en el Senado, como también hicieron los también socialistas Marcelino Iglesias (expresidente de Aragón), Francesc Antich (Baleares) y Joan Lerma (Valencia). Estos con sueldos de 73.820,94 y 82.192,62 euros. Hasta hace unos días, José Antonio Griñán también era senador por designación autonómica, acta a la que renuncia tras ser señalado por el Tribunal Supremo en el caso de los ERE irregulares de la Junta de Andalucía.
Entre agosto y septiembre, los expresidentes populares Albert Fabra, Luisa Fernanda Rudí, Juan Ramón Bauzá y Pedro Sanz, al margen de futuras de su integración en futuras comisiones, pasarán a engrosar en sus cuentas el sueldo de 61.262 euros.
De los 52 millones de presupuesto que tiene el Senado, según el diario El Mundo, 13,3 son las retribuciones básicas y otras retribuciones de los senadores. No en vano, el sueldo mínimo de los senadores es de 61.000 euros. El Senado ha pagado un millón de euros en viajes de sus señorías entre noviembre y marzo.
La defensa del PP
El portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Rafael Hernando, ha defendido este miércoles que los expresidentes autonómicos de su partido se incorporen al Senado, ya que, según ha dicho, su experiencia es un "plus" que hay que aprovechar. Por eso, ha calificado de "absurdo" que se haya abierto un debate sobre este asunto.
"Me parece chocante que se cuestione que una persona que ha sido mayoritariamente votada por sus ciudadanos no pueda estar en el Senado", ha declarado Hernando en los pasillos del Congreso al ser preguntado si comparte la opinión de otras formaciones de que el Senado se ha convertido en una agencia de colocación de expresidentes.
El dirigente del PP ha asegurado que se trata de un "debate absurdo" porque se está "cuestionando" a expresidentes del PP que en las pasadas elecciones autonómicas recibieron un gran apoyo ciudadano, en referencia a Luisa Fernanda Rudi (Aragón), Alberto Fabra (Comunidad Valenciana), José Ramón Bauzá (Baleares) o Pedro Sanz (La Rioja).