La diputada de UPyD Irene Lozano ha defendido este viernes a su partido como un proyecto de "raíces muy sólidas" y le ha augurado futuro pese al "bache" y al "momento difícil" que atraviesa, y se ha referido también al "ruido" que se ha generado con su posible expulsión, precisamente en el inicio de la campaña electoral, lo que considera "verdaderamente lamentable".
En rueda de prensa en Granada, donde ha acudido para acompañar a la candidata de UPyD a la Alcaldía de la capital, Mayte Olalla, Lozano ha recordado que la expulsión es la "sanción máxima" que se le puede imponer a un militante, y ha incidido en que "si se quiere descartar a candidatos en el congreso extraordinario" que el partido celebrará después de junio, "lo suyo es descartarlos democráticamente".
Así se ha pronunciado tras ser preguntada por la información que publican Infolibre y El Mundo, que señala que la próxima semana el Consejo de Dirección pondrá sobre la mesa la apertura de un expediente disciplinario a Irene Lozano que podría acabar con su expulsión, tras una serie de correos electrónicos en los que supuestamente la diputada expone a algunos miembros de UPyD la posibilidad de crear la Plataforma Encuentro, para reunir a todos los críticos y descontentos con la dirección.
Sobre este último asunto, Lozano se ha limitado a responder que UPyD va a conseguir ahora "un nuevo comienzo". "Lejos de terminar, vamos a conseguir unos muy buenos resultados en estas elecciones, estoy segura de que toda la gente que nos para por la calle y nos dice que somos los más trabajadores y los más honestos va a ser consciente de que su voto es muy importante para plasmar eso, y después vamos a empezar un nuevo comienzo en UPyD, este es un proyecto que terminará el día que hayamos conseguido tener una democracia de calidad, derechos de ciudadanía iguales, acabar con la desigualdad social, y conseguir que nuestros jóvenes no se tengan que ir al extranjero".
Lozano ha dicho que UPyD es "un partido democrático y transparente como ningún otro" y se ha mostrado convencida de que lo seguirá siendo "por mucho tiempo". Por eso, ha indicado que "para hablar de discrepancias internas" ya tendrán tiempo, y se ha mostrado contraria a contribuir al "ruido" sobre su posible expulsión. Ha dicho además que este asunto no le preocupa, porque tiene "muy tranquila" la conciencia y no tiene de qué avergonzarse. "Me preocupa que la gente como Mayte (Olalla) vea emborronada su campaña con este tipo de informaciones", ha indicado.