
La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, se ha pronunciado hoy contra el genocidio religioso y la persecución por motivo de creencias en la inauguración del Congreso internacional sobre libertad religiosa "Todos somos nazarenos", donde ha destacado la capacidad de Madrid para acoger otras culturas y tradiciones.
Por ello, la Declaración de Madrid apoyará, según ha anunciado la alcaldesa, a las víctimas de estas persecuciones y denunciará el genocidio religioso, así como la actividad terrorista de los grupos yihadistas, con el objetivo de apoyar "a los que la defensa de sus convicciones les cuesta hasta la vida".
Botella ha puesto en valor la libertad religiosa y ha afirmado que la religión es "uno de los puntos de referencia en el horizonte cultural del hombre".
También ha señalado la importancia del respeto a la persona y la defensa de la dignidad humana.
Durante su discurso el congreso, Botella ha puesto como ejemplos los ataques que sufren los cristianos de algunos países de Asia y África.
En el evento también se han condenado actos como la decapitación de coptos en Libia o el secuestro de 200 niñas estudiantes en Nigeria, hace ahora un año, por la milicia radical de Boko Haram.