
La diputada del PP en el Congreso Cayetana Álvarez se Toledo se ha convertido en las últimas horas en la voz más discordante del partido después del discurso con el que el presidente del Gobierno y de la formación, Mariano Rajoy, puso el broche Junta Directiva Nacional 'popular'. Cierre de filas de los barones en torno a Rajoy
En una carta abierta publicada en el diario El Mundo, Álvarez de Toledo se ha quejado de la imposibilidad de tomar la palabra en la Junta una vez Rajoy concluyó su intervención: "Acudí con interés a escuchar a nuestros máximos dirigentes y también con la voluntad de tomar la palabra. Por desgracia sólo pude escuchar. Cuando el presidente acabó de hablar se dio, abruptamente, el acto por concluido, sin que ninguno de los asistentes pudiera tomar la palabra".
Una tesis que ha corroborado en los micrófonos de Onda Cero, donde este miércoles ha asegurado que sintió "frustrada y preocupada" cuando los asistentes al evento empezaron a aplaudir y no tuvo forma de contestar al líder del PP.
Ante la ausencia de réplica al discurso del presidente, Álvarez de Toledo ha decidido adjuntar las notas que tenía previstas como crítica a la gestión de Rajoy en su carta. En estas notas, la diputada 'popular' acusa a la cúpula del partido de haber caído en un "déficit grave de política".
En su escrito, la diputada comienza alabando la recuperación económica propiciada, según sus palabras, por el Gobierno del PP, pero enseguida introduce el matiz crítico de que eso no es suficiente: "La economía no lo es todo. La economía es mucho, pero no lo es todo ni es suficiente. Las encuestas lo indican: los buenos datos económicos no se traducen en apoyos para nuestro partido".
Del mismo modo, Álvarez de Toledo descarta en la misiva que el partido esté sufriendo un problema de comunicación a marketing, sino falta de perfil político. Algo que achaca al perfil tecnocrático del Gobierno de Rajoy: "No basta con rescatar la economía. También la política ha de ser rescatada. Debemos evitar el tacticismo y la tecnocracia, y volver a hacer política. Política ambiciosa. Política de perfil alto. Política de calidad".
En las líneas sucesivas, además de combatir a los "populismos", Álvarez de Toledo reprocha al Gobierno no haber mostrado más contundencia contra la consulta del 9-N auspiciada por la Generalitat catalana: "El pasado 9 de noviembre, un Gobierno regional de una democracia europea convocó, organizó, celebró y dio publicidad y cuenta de una consulta política que había sido declarada ilegal por el máximo tribunal del Estado. El Gobierno de la nación no hizo, a mi juicio, todo lo que debía haber hecho para impedirlo. Yo escribí entonces que me sentía políticamente desamparada por el Gobierno y creo que muchos españoles sintieron lo mismo".
Por último, previene a Rajoy del auge de Ciudadanos y pide al PP recuperar sus señas de identidad para volver a ocupar todo el espacio del centro-derecha español a la vez que salir al encuentro de formaciones como la de Albert Rivera: "Rescatar la política es lo que va a permitirnos aglutinar nuestro espacio habitual del centro derecha, pero también avanzar hacia el encuentro con quienes comparten con nosotros un suelo transversal de valores democráticos, empeños regeneracionistas y objetivos políticos racionales".