Las gratificaciones extraordinarias de personal de la última etapa del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ascendieron a 13,49 millones de euros. Esta cantidad, repartida entre funcionarios de diferentes departamentos ministeriales, se refleja en las 'nuevas' balanzas fiscales que publicará Hacienda y que tendrán su base en 2011, año del último aliento del Ejecutivo socialista.
Los que mayor parte se llevaron fueron el Ministerio de Defensa, 2.962.738, y el de Interior, 2.582.509. Quien salió 'perdiendo' en estos sobresueldos fue Ciencia e Innovación, con 19.740 euros.
Según datos de Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) recogidos por elconfidencial.com, estas gratificaciones también recayeron sobre el Tribunal de Cuentas (231.911 euros), el Consejo de Estado (44.487 euros) e incluso a la Presidencia de Gobierno (218.703 euros) y todo esto independientemente de extras por dietas u otros complementos al sueldo.
Llaman la atención cifras como las destinadas al Ministerio de Medio Ambiente (1.054.519 euros) o al Consejo General del Poder Judicial (570.351 euros) debido a sus reducidas plantillas.
Las polémicas 'bufandas'
Estas 'bufandas', como se conoce en la Administración estas gratificaciones extraordinarias, han sido siempre motivo de polémica por repartirse a discreción entre los empleados públicos de los departamentos sin ningún control más allá de que aparezcan en las cuentas oficiales.
Los 376.594 euros extraordinarios que Fátima Báñez destinó a los funcionarios del ministerio de Empleo en 2012 levantó ampollas por la alta cifra de paro con la que trabaja esa cartera.
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La petición de Zapatero