
El actor Willy Toledo está feliz en La Habana. Desde tierras caribeñas, adaptado a la isla, opina que Cuba ha cambiado mucho, que la gente está mucho más contenta. Toledo también está convencido de que "la libertad de movimientos y de acción que hay en La Habana no la tenemos en Madrid".
El artista madrileño, aficando desde hace unos meses, está convencido que detrás ha dejado una cuidad -Madrid- en la que todo está prohibido, en la que todo cuesta cantidades indignantes de dinero, desde aparcar tu carro a tomarte un cerveza. Donde ir al cine cuesta 13 o 14 euros y por menos de 20 no entras en un teatro. Pues aquí -se reafirma en una entrevista concedida a Público- he encontrado la cuidad más hermosa del mundo para pasear, la más segura de todas las que conozco con diferencia. Puedes entrar en Centrohabana en una calle oscura y pasear con absoluta tranquilidad. Veo que la calle es de la gente, mientras que en Madrid entras en un sitio y enseguida encuentras un cartel que dice: "prohibido jugar a la pelota, prohibido montar en bicicleta...".
El horario solar de Willy Toledo
Y hablando de Madrid, su ciudad natal, defiende que la villa y corte "es la capital de marcha, de la juerga, probablemente de toda España, pero yo ahora estoy muy tranquilito, no estoy saliendo prácticamente nada. De vez en cuando compramos una botellita y vamos a casa de un amigo o al malecón a hacer botellón. Pero estoy saliendo muy poquito. De hecho estoy haciendo lo que tenía ganas de hacer hace muchos años, que es llevar el horario solar. Me acuesto tempranito, a las 11 estoy durmiendo y me levanto a las 7, 30 de la mañana. Y estoy feliz con eso.
Y sobre el pueblo cubano opina que "es aquí donde quizás haya menos animadversión hacia los españoles. Por otro lado nunca me han hablado de la Madre Patria, cosa que sí me han hecho indígenas en Chiapas. Evidentemente aquí son todos españoles o descendientes de españoles, no es como Uruguay, Argentina, Chile, que hay descendientes de alemanes, suecos y prácticamente de toda Europa".