El príncipe Felipe, heredero al trono de España, y su esposa Letizia, fueron recibidos con abucheos y silbidos este jueves en el Gran Teatro del Liceo de Barcelona donde acudían a una representación de L'elisir d'amore de Gaetano Donizetti. La Monarquía vuelve a suspender con un 3,98
La pareja, que llegó a bordo de un coche oficial, fue recibida frente al célebre teatro de la capital catalana por una multitud de curiosos. Algunos lanzaron silbidos de desaprobación mientras otros aplaudían, según imágenes de televisión difundidas por los medios españoles.
Con estoicas sonrisas, la pareja tuvo sin embargo que soportar un abucheo mayor cuando, ya en el interior, se disponía a tomar lugar en el palco, junto a autoridades locales, invitados por el Teatro del Liceo a la representación de la ópera de Donizetti.
El peor momento de la Familia real
La familia real española pasa por su peor momento de popularidad desde la inculpación del yerno del rey Juan Carlos, Iñaki Urdangarín, en un caso de presunta corrupción que salpica a su esposa, la infanta Cristina.
La opinión pública también criticó que el monarca viajase el año pasado a Botsuana para cazar elefantes mientras el país está asfixiado por la recesión y políticas de austeridad. Aquel escándalo llevó al rey a pedir disculpas públicamente, en un acto inédito en el país.
En este contexto, la casa real española emprendió una ofensiva de comunicación destinada a mejorar la imagen de la monarquía, que por primera vez hizo públicas sus cuentas y ahora se dispone a entrar en una ley de transparencia en debate en el Parlamento.
En Cataluña, territorio del noreste de España que reivindica lengua y cultura propias como símbolos de identidad, el sentimiento independentista crece en los últimos tiempos atizado por la crisis económica.
El presidente regional, el nacionalista Artur Mas, prometió organizar en 2014 un referéndum de autodeterminación, al que se opone firmemente el Gobierno español.
Cospedal, con los Príncipes
Este viernes, María Dolores de Cospedal ha manifestado su repulsa a la pitada que han recibido los Príncipes de Asturias en el Liceu de Barcelona. "Es una falta de respeto muy desagradable... No son la mejor expresión de nuestro pueblo", ha declarado.
Convivencia Catalana, por su parte, atribuye la pitada a los Príncipes a "la permisividad con el secesionismo".
El CIS no pregunta sobre la Monarquía
