El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, considera que debe haber una respuesta legal a los escraches o acoso a políticos, puesto que no se puede aceptar que una "minoría violenta" quiera condicionar el voto de los diputados y convertir en "papel mojado" lo que han votado los ciudadanos. Colau convoca escraches en todas las sedes del PP.
En una entrevista en la Cadena Ser, el ministro aseguró que "lo grave" de los escraches es que "se está intentando condicionar el voto de los diputados" para que aprueben una determinada normativa hipotecaria y sobre los desahucios.
Aseguró que el Código Penal ya contempla una "respuesta adecuada" a este tipo de presión a políticos. Por este motivo, destacó que esta conducta debe "tener una respuesta como la que estoy convencido que se va a producir por parte de la Fiscalía y, en su caso, de los tribunales".
Respeto a las urnas
Aseguró que el respeto a la autonomía de los parlamentarios es algo "que tienen que garantizar todos los poderes públicos, entre ellos el Ministerio Fiscal". Remarcó, en este sentido, que "nunca" es aceptable "la violencia frente a un parlamentario" ni para resolver "ningún problema".
En cuanto al problema de los desahucios, Gallardón dijo que es un asunto "muy sensible", en el que hay que encontrar un "equilibrio" para evitar que la solución adoptada no impida que los bancos den nuevos créditos y se impida el acceso a la vivienda de la próxima generación. A este respecto, opinó que la dación en pago es una "solución fácil" que impediría la concesión de futuras hipotecas.