
La grabación de la comida entre la dirigente del PPC, Alicia Sánchez Camacho, y la expareja de Jordi Pujol Ferrusola, Victoria Álvarez, que ha destapado el escándalo de las escuchas del PSC a CDC es tan sólo una de las grabaciones enmarcadas dentro de una investigación mayor que los socialistas catalanes habrían encargado a la agencia privada de detectives 'Método 3' para intentar descubrir nuevos datos sobre el cobro de comisiones ilegales que CDC constituyó con el Palau de la Música. Este encargo del PSC coincide en el tiempo con las pesquisas de la UDEF sobre la corrupción de CiU que han visto la luz a final de 2012. La grabación de la cena que destapó la trama.
Según fuentes cercanas al número dos del expresident José Montilla, José Zaragoza, consultadas por El Mundo, éste habría encargado una "investigación integral" sobre la relación entre el Palau y las empresas de la familia Pujol. El objetivo era continuar con las pesquisas que evidenciaban una monumental red de corrupción urdida por Jordi Pujol en sus más de veinte años de mandato.
Es en este escenario en el que 'Método 3' procedió a la grabación del encuentro entre Camacho y Álvarez en el restaurante 'La Camarga' de Barcelona y que, al parecer habría contado con la "complicidad" de alguien del local. Ese encuentro habría posibilitado al PSC conocer de boca de la ex de Pujol Ferrusola los negocios de su expareja en México, en Puerto Rosario, en Argentina, así como de las empresas que controla en Liechtenstein a través de patrimonio repartido por todo el planeta. También le reveló la existencia de los viajes a Andorra con billetes de 500 en el maletero hasta los negocios diseminados por todo el mundo y la confesión de que los Pujol operarían a través de las Islas del Canal de La Mancha.
Esta información que Álvarez Confiesa a Camacho en 2010 es la misma que ella misma ha relatado a la Unidad de Delitos Económicos y por la que este jueves a pedido protección policial ya que dice "estar aterrada".