El exministro de Fomento Francisco Álvarez-Cascos ha asegurado este martes que los daños causados por el accidente del petrolero 'Prestige' en noviembre de 2002 frente a las costas gallegas fueron "inevitables" y ha defendido las decisiones adoptadas por las autoridades marítimas españolas. Ésta declaración se enmarca en el escándalo sobre supuesta financiación irregular del PP que pone el foco sobre los secretarios generales de la organización que convivieron con el exgerente y tesorero del partido, Luís Bárcenas, investigado por la titularidad de una cuenta en suiza con 22 millones de euros.
Álvarez-Cascos ha declarado esta mañana como testigo ante el tribunal de la Audiencia de A Coruña que juzga los daños medioambientales causados por el 'Prestige', que provocaron la mayor catástrofe medioambiental de la historia de España.
Ante las preguntas de los abogados de La Plataforma 'Nunca Máis', el exministro de Fomentoha respondido que "No me imagino al director de los bomberos de Nueva York sentado en un tribunal por no haber evitado que se cayeran las Torres Gemelas", según informa La Voz de Galicia, quien también asegura que Cascos ha admitido haberse ido de caza el fin de semana posterior a la catástrofe aunque ha argumentado que en todo momento estuvo ?perfectamente informado?.
"Si el ministro no tiene que adoptar decisiones técnicas, no tiene ningún sentido que se le consulten cuestiones técnicas", ha remarcado el exministro y expresidente del Principado de Asturias, quien, además, ha subrayado que todas las decisiones se tomaron desde el respeto a la legislación.
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