
El socialista Alfredo Pérez Rubalcaba ha advertido hoy a sus parlamentarios de que la conferencia política que va a ocupar al PSOE durante los próximos nueve meses no puede agotar su tarea y les ha arengado para lograr una "oposición más eficaz, más firme, mejor coordinada, priorizada y sobre todo tenaz".
En una reunión celebrada en el Congreso a puerta cerrada con diputados, senadores, eurodiputados y portavoces de parlamentos autonómicos, Rubalcaba les ha marcado como asuntos prioritarios los desahucios por impago de hipotecas, las preferentes, la renovación de la ayuda de 400 euros a los parados sin prestación, la defensa del sistema público sanitario y la lucha contra la "ley Wert" y contra la Ley de Tasas Judiciales.
Tres días después del Comité Federal que rechazó el derecho a decidir y avaló la idea de reformar la Constitución en pro de un Estado federal en el que encajen mejor comunidades como Cataluña, el líder del PSOE ha subrayado la necesidad de buscar una "mejor ubicación" a las autonomías que no se sienten bien representadas porque hay "singularidades que no están suficientemente bien" recogidas en la Carta Magna.
En esa línea, la diputada del PSC y exministra Carme Chacón se ha distanciado de la declaración de soberanía que han registrado esta mañana CiU y ERC -y que se votará el 23 de enero en el Parlament- y ha dicho que hoy por hoy los socialistas catalanes no van a "seguirles en ese camino".
Chacón ha opinado que, mientras que el presidente catalán, Artur Mas, busca su propia supervivencia política y ERC persigue la ruptura, el PSC apuesta por la "convivencia" y por una "solución federal" para una Cataluña que se siente "poco reconocida" dentro del Estado y "maltratada fiscalmente".
Precisamente la cuestión catalana ha girado sobre buena parte de las quince intervenciones que, según fuentes socialistas, han tenido lugar a puerta cerrada tras el discurso en abierto de Rubalcaba.
Así, la exministra Rosa Aguilar ha apostado por abrir el debate territorial en la línea de lo manifestado por el presidente de la Junta de Andalucía y del PSOE, José Antonio Griñán, partiendo de aquello que une a todos los socialistas, que es el rechazo a la independencia.
Según han explicado a Efe fuentes presentes en la reunión, Aguilar ha precisado, no obstante, que hay que saber abordar las discrepancias con naturalidad, en alusión al derecho a decidir que defiende el PSC y cuya postura no comparte el PSOE.
Al igual que otros de sus compañeros de bancada, la exalcaldesa de Córdoba ha pedido que el debate territorial no enturbie la realidad de la crisis económica ni la obligación de ofrecer respuestas y alternativas a la política que está llevando a cabo el Gobierno del PP, que todos los intervinientes han tachado de equivocada y perjudicial para la ciudadanía.
En esta misma línea, el diputado gallego Miguel Cortizo ha advertido de la importancia de que los socialistas construyan una alternativa creíble y sólida y, para ello, ha instado al PSOE a "ponerse las pilas".
También es de la misma opinión el expresidente castellanomanchego José María Barreda, para quien el PSOE debe trabajar incansablemente para recuperar apoyos electorales mediante su propio proyecto, para no quedarse "en tierra de nadie".
En su intervención, Rubalcaba ha aprovechado para acusar al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de mentir sobre el déficit que había dejado el anterior Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero y de utilizar ese "engaño" como excusa para recortar.
"Recortó porque quiso", ha proclamado, tras recordar que hace un año el Gobierno de Rajoy justificó sus primeros ajustes con el argumento de que el Ejecutivo de Zapatero les había engañado sobre el déficit, cuando lo cierto es que aún no se conocía la cifra de las comunidades, igual que ahora no se sabe tampoco la del 2012, porque las autonomías aún no han dado su dato.
El secretario general del PSOE y presidente del grupo en el Congreso ha incidido en que el PP ha perdido su mayoría social tras gobernar un año en el que ha generado "pobreza", "sufrimiento" e "incertidumbre", en el que la crisis económica ha derivado en una "crisis social muy profunda", una "crisis territorial muy compleja" y una "crisis política muy preocupante".
Para dar solución a esas tres crisis, los socialistas preparan su propuesta de reforma constitucional "limitada, meditada y medida", con dos límites infranqueables: no cambiar el concepto de España y consagrar la igualdad de derechos de los ciudadanos con independencia del lugar en donde vivan.
Dicha propuesta incluirá la reforma del Senado y una "mejora" del sistema electoral, con "circunscripciones más pequeñas, para que los diputados y los electores estén más cerca", ha dicho Rubalcaba.