María Cristina Díaz Márquez vuelve a ser la cara de Interior en día de huelga. Con mayor temple y soltura pero con el mismo tono de voz cándido y pueril, que la convirtió en una de las estrellas del 29 de marzo, ha defendido los datos del ministerio. 'La niña portavoz' ha estrenado nuevo look, con el pelo más oscuro, extensiones en las pestañas y atuendo más recatado con los que dota a su discurso de mayor credibilidad que en la pasada protesta.
Esta licenciada en derecho con máster en Gestión y Dirección de Empresas en la CEOE y a sus oposiciones de judicatura parece haber sumado a su currículum un curso express de oratoria para que ésta vez los nervios no le volviesen a pasar factura.
Con todo, por el momento, no consigue desprender de su voz su cadencia inocente que sitúan al oyente en una clase de primaria. Así lo han vuelto a expresar varios usuarios de la red social Twitter que la califican de "niña repelente de papa" y de tener "poco espíritu". Otros ven detrás de esa actitud una máscara que se pone en evidencia cuando impide preguntas de los medios.
Su vídeo del 29-M