
Julio Iglesias desmonta la declaración de Eduardo Zaplana en el 'caso Ivex', escándalo que evidencia irregularidades en los pagos del contrato de la Comunidad Valenciana con el cantante a finales de los años 90. Éstos ascienden a un total de 900 millones de pesetas, según testifica Iglesias y a 372 millones, según el que en ese momento era el presidente de la Generalitat.
Zaplana admite la existencia de un único documento donde el Instituto Valenciano de la Exportación (Ivex) acuerda con el señor Iglesias el pago 375 millones en concepto de patrocinio de la comunidad a través de su imagen.
El presidente ocultó la firma de otro contrato de casi seis cientos millones de pesetas. Un detalle que no pasó por alto Julio Iglesias en su declaración en mayo ante el juez en República Dominicana, que atendía una comisión rogatoria del Ministerio de Justicia ya que el artista reside oficialmente en Punta Cana y tiene la doble nacionalidad española y dominicana.
Zaplana, en sus trece
Zaplana insistie en que Iglesias solo cobró dicha cantidad "He explicado hasta la saciedad que una cosa son los derechos de imagen del artista y otra es que los conciertos tienen una intendencia, alquiler de local, equipos, gastos de desplazamiento, y eso se abonaba aparte?.
Además cuestiona que el contrato aludiera a que esa parte la cobraba el cantante: "Si las sociedades de Julio Iglesias organizaban los conciertos, los cobraría".