Madrid, 13 mar (EFE).- El "número dos" de Esperanza Aguirre y portavoz del Gobierno de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, ha afirmado hoy que la decisión del alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, de permanecer en su cargo era "previsible" y que "no es la primera vez" que actúa de esta forma.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, González puntualizó que el anuncio de Gallardón "no es ninguna sorpresa" y que "no es la primera vez que anuncia su intención de dejarlo. Luego siempre ha regresado".
Preguntado si a partir de ahora el alcalde adopta el papel de "el bueno de la película" al anunciar que apoya a Rajoy, mientras Esperanza Aguirre asume el de "la mala", el vicepresidente primero madrileño ha considerado "muy respetable" que Gallardón dijera entonces que dejaba la política y agregó que "todos en su momento dijimos que el alcalde iba a seguir y hoy el alcalde ha dicho lo que todo el mundo preveía. No es la primera vez y era bastante previsible".
"¿Qué hemos visto también?" se preguntó González y se respondió, "pues la actuación de cada quién".
Agregó que "yo nunca he visto otra reacción en la presidenta Aguirre que la de ponerse a trabajar, y desde ese mismo día, para hacer campaña para obtener los mejores resultados para el PP y ayudar a la victoria de Mariano Rajoy".
Subrayó que "todo el mundo ha podido ver la actuación que se ha tenido en esta campaña tanto por unos como por otros" y añadió que "nadie puede discutir que Esperanza Aguirre se ha volcado en esta campaña de una manera extraordinaria, no sólo en la Comunidad, sino también fuera de la Comunidad ha hecho muchísimos actos, casi más fuera que dentro y no ha hecho otra cosa que ayudar a Mariano Rajoy a ganar estas elecciones".
González rechazó vincular la permanencia del alcalde a la aprobación del proyecto Prado-Recoletos, ya que "la continuidad del señor Gallardón era bastante previsible y no creo que esté ligada a nada" y "mucho menos a condicionar los propios proyectos de gestión que no tienen nada que ver con nada más que con el cumplimiento de las determinaciones legales".
"No creo que nadie haya pensado condicionar nunca el cumplimiento de la normativa con la continuidad o no al frente de sus responsabilidades, porque sería disparatado", remachó.