
Ni el PSOE ni las Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública ven con buenos ojos el último anuncio de Gallardón a propósito de no la inclusión de la malformación del feto como razón para interrumpir el embarazo. Los socialistas auguran "una vuelta al franquismo".
El portavoz socialista en la Comisión de Sanidad del Congreso, José Martínez Olmos, ha considerado este lunes que el anuncio del ministro de Justicia de que la malformación del feto no será ya un supuesto para abortar supone una vuelta al franquismo, ya que llevará a las mujeres a la clandestinidad.
"Cortina de humo"
Martínez Olmos ha señalado que la propuesta de Alberto Ruiz-Gallardón es una cortina de humo para tapar "el fracaso de la política económica del Gobierno".
No obstante, ha incidido en que "la reforma planteada tiene unas consecuencias en términos de salud de la mujer, ya que "si el aborto va a ser tremendamente difícil nos podemos encontrar con un incremento de los abortos clandestinos", lo que supone "un riesgo claro de mortalidad para la mujer que nos puede situar en la España franquista".
El representante socialista ha insistido en que abrir ahora el debate de la reforma de la ley del aborto cuando no es una prioridad para la ciudadanía tiene como objetivo desviar la atención informativa de la principal preocupación de la sociedad, que es la situación económica.
Además, a su juicio, es llamativa la ausencia del debate de la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, cuando se trata de un tema sanitario.
Por ello, para Martínez Olmos, el asunto se está politizando y el debate es "puramente ficticio".
El portavoz socialista ha insistido en que si finalmente se da el paso y se ponen restricciones a la interrupción del embarazo, "el riesgo para la salud de las mujeres será evidente porque la obligarán al aborto clandestino".
El riesgo de abortar fuera de España
La Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) ha advertido del "problema de salud" de muchas mujeres que tendrán que salir al extranjero para interrumpir su embarazo no deseado por graves lesiones fetales.
La federación ha reaccionado así al anuncio realizado por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, quien en una entrevista publicada en el diario La Razón señaló que la malformación del feto no será ya un supuesto para abortar en la futura reforma de la Ley del Aborto.
Ante estas declaraciones, la citada federación ha comunicado, en una nota de prensa, que esta modificación afectará a mujeres con menos recursos socioeconómicos, que interrumpirían su embarazo de manera clandestina y sin las debidas condiciones sanitarias.
Según la federación, esta medida supondría "un gravísimo atentado contra la libertad de las mujeres", a las que obligaría, contra su voluntad, a mantener embarazos "a pesar de que las pruebas y revisiones demostraran graves taras y malformaciones en los fetos".
La federación entiende que tras esta decisión está "la ideología conservadora de un Gobierno que pretende satisfacer las demandas de los grupos religiosos más ultras y radicales".
JpD critica a Gallardón por atacar los derechos de las mujeres
El portavoz de Jueces para la Democracia (JpD), Joaquim Bosch, ha considerado hoy que el anuncio del ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, de que la malformación del feto no será ya un supuesto para abortar supone "un ataque a los derechos de las mujeres".
Bosch ha censurado en un comunicado la propuesta del titular de Justicia de castigar penalmente a las mujeres y a los facultativos que practiquen interrupciones voluntarias del embarazo en los casos de malformación del feto.
El portavoz de JpD ha criticado el empeño del ministro de Justicia "por criminalizar conductas que fueron despenalizadas hace varios lustros", sin que ello haya generado problemas.