Política

Correa inicia crucial gira por países vecinos de Colombia en medio de crisis

El presidente de Ecuador, Rafael Correa, inició el martes una gira por países vecinos de Colombia buscando apoyo tras romper relaciones con el gobierno de Alvaro Uribe, al que acusó de frustrar la entrega de rehenes al matar a 22 rebeldes de las FARC en territorio ecuatoriano.

El mandatario partió hacia Perú, en la primer escala del periplo de cuatro días que también lo llevará por Brasil, Panamá, República Dominicana, Venezuela -su mayor aliado en la crisis-, y posiblemente Nicaragua.

"Los gobiernos de Latinoamérica sabrán cerrar filas y detener este nefasto precedente que está intentando imponer el gobierno de Colombia", señaló Correa al abogar por respaldo internacional luego de que Bogotá lo relacionó con las FARC.

El líder socialista rompió relaciones con el gobierno de Uribe y aseguró que el ataque que mató al jefe rebelde Raúl Reyes frustró la liberación de doce rehenes de la guerrilla, incluida la política colombo-francesa Ingrid Betancourt, que según su gobierno debía darse en marzo en Ecuador.

Junto con el número dos de la agrupación murieron otros 21 combatientes y tres resultaron heridos, de acuerdo con un nuevo informe suministrado por Quito que difiere de los 17 muertos denunciados por Bogotá.

Correa empezará su ofensiva internacional en Perú, donde se entrevistará con su par Alan García, luego se reunirá con Luiz Inacio Lula da Silva en Brasil el miércoles, según una agenda preliminar divulgada por Cancillería.

Entre miércoles y jueves dialogará con el gobierno de Panamá y con el de su aliado venezolano Hugo Chávez, quien le ofreció todo el respaldo ante Colombia tras secundarlo en su decisión de expulsar al embajador colombiano y militarizar las respectivas fronteras.

El gobernante terminará su recorrido en Santo Domingo el viernes, cuando intervendrá en la reunión del Grupo de Río, aunque su ministro de Seguridad Interna y Externa, Gustavo Larrea, incluyó una escala por Nicaragua.

En su mensaje a la nación previo a la gira, Correa justificó el rompimiento con Colombia aduciendo las graves acusaciones que le endilgaron las autoridades al vincularlo a él y a su ministro con los insurgentes.

Ecuador afirmó que los contactos con las FARC estaban orientados exclusivamente a facilitar la liberación de rehenes, y que en los mismos también participaba Francia.

"Todo fue frustrado por las manos guerreristas y autoritarias. No podemos descartar que esta fue una de las motivaciones de la incursión (colombiana) y ataque por parte de los enemigos de la paz", añadió Correa.

Y aseguró que "todo contacto con la guerrilla ha sido por motivos humanitarios junto con un país como Francia. ¿Se le ocurriría entonces a alguien acusar al presidente (Nicolas) Sarkozy de apoyar a las FARC?".

Pero el gobierno de Alvaro Uribe negó dichas gestiones y denunció que por el contrario las mismas tienen "las características de tráfico de secuestrados", según un comunicado de la Cancillería.

Además, dijo desconocer los contactos entre el ministro de Seguridad de ecuatoriano y las FARC.

"El presidente Rafael Correa siempre le aseguró al presidente Alvaro Uribe que no adelantaría ninguna gestión con las FARC sin conocimiento y autorización del gobierno de Colombia", anotó.

vel/rpl

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky