Las elecciones andaluzas y asturianas han tenido como efecto 'resucitar' a un partido muerto desde las pasadas elecciones generales del 20N. Pero el triunfo socialista tiene un precio, al depender, sobre todo en Andalucía, de IU para gobernar.
Con el aumento de poder de IU en Andalucía, está previsto que su dirigente, Diego Valderas, ponga serias condiciones a los socialistas de José Antonio Griñán. Estas condiciones obligarían al PSOE a tomar un giro a la izquierda más radical que podría crearle problemas de estabilidad en el futuro gobierno, como apunta el diario El País.
Los problemas pueden venir en varios sentidos, por ejemplo, en el caso de que IU continúe con su postura de realizar una oposición dura y sin márgenes al PP si no ceden en los recortes. El déficit y la estabilidad presupuestaria, de la que el PSOE también tendría que hacerse responsable en los presupuestos regionales, podría suponer otro choque con IU, que aboga por no "tocar" ni una sola partida de servicios públicos.
Otro posible panorama de choque lo supondría que IU volviera con reivindicaciones históricas de la formación, como la nacionalización de sectores estratégicos.
Para Rubalcaba, estos obstáculos son asumibles y el secretario general del PSOE ha dejado las "manos libres" tanto a José Antonio Griñán como a Javier Fernández para que lleven a cabo las negociaciones. Habrá que esperar a ver cuáles son los puntos de cesión con una refortalecida y crecida IU.
Entidades
José Antonio Griñán
Expresidente y exsenador de Andalucía
IU propone tres fórmulas de gobierno