La secretaria general de ERC, Marta Rovira, ha emplazado este lunes al líder de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran, a que aclare el gasto del Estado en embajadas y representación exterior, y después haga propuestas para "adelgazar" este ámbito.
En la rueda de prensa posterior a la Comisión Permanente del partido, ha considerado que Duran es la persona indicada al ser reelegido presidente de la Comisión de Exteriores del Congreso, y además ha pedido al Govern que potencie las delegaciones catalanas en el exterior.
Rovira ha recalcado que saber el gasto en representación exterior del Estado sería un acto de transparencia, y ha añadido que serviría para poner encima de la mesa que en este ámbito el Gobierno de Rajoy tiene mucho margen para recortar en "gastos suntuosos".
Ha dicho que, mientras los gastos de las delegaciones catalanas en el exterior representan 2,5 millones de euros, el Gobierno acepta --según datos de ERC-- un cambio de residencia del embajador de Marruecos por seis millones o una reforma de la piscina de la embajada española en Arabia Saudita por medio millón.
Fin al "peaje" del PP
Rovira también ha pedido al Govern que apueste por las delegaciones que tiene la Generalitat en el exterior porque son "clave" para la reactivación económica de Catalunya, y le ha exigido que se desmarque del PP que le pide que las recorte.
"El Govern se equivoca cerrando delegaciones --como la de Buenos Aires--, y aún se equivoca más si es el precio que paga por pactar con el PP --los presupuestos--.
Creemos que lo que tiene que hacer el Govern para reactivar la economía es ayudar a las exportaciones", ha sentenciado.
Los republicanos defienden que las delegaciones catalanas --que potenció el exlíder del partido Josep-Lluís Carod-Rovira cuando era vicepresidente de la Generalitat-- son vitales para las empresas catalanas que exportan por un valor de 16.000 millones de euros anuales.
Según Rovira, el volumen de negocio de las empresas catalanas con Francia es de 8.500 millones, con Alemania de 4.100 y con Estados Unidos de 1.100, por lo que ERC concluye que los 2,5 millones que cuestan las delegaciones son asumibles por las arcas públicas catalanas.
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