
El ingreso hospitalario del vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, en un hospital a causa de una infección urinaria ha desatado todo tipo de rumores acerca de su continuidad política, y sobre todo, de su posible y más que comentada candidatura para suceder José Luis Rodríguez Zapatero al frente del PSOE. El vicepresidente deja la UCI y pasa a planta
Habladurías que han indignado a Ferraz, según han asegurado a EcoDiario.es fuentes de dentro de la sede del PSOE. Portadas como la de ABC ("Rubalcaba, en la UCI") han provocado el malestar del partido, que aseguran que el vicepresidente podrá retomar en breve sus apariciones, tras un lógico proceso de recuperación. "Su salud es de hierro", aseguraba en este sentido este mismo martes el ministro de Industria y Turismo, Miguel Sebastián.
Sin embargo, preguntados por si esta enfermedad puede afectar a la carrera sucesoria de Rubalcaba - en el caso de que la hubiese- las mismas fuentes no son tan claras y no saben precisar en que posición se queda el político de cara a la sucesión.
Experiencia 'caduca' versus a la frescura de la juventud
Una cosa parece clara. La expectación y continúa exposición de su figura que ha generado su infección y su ingreso en la UCI durante unas horas, podrían afectar a la imagen del hasta ahora mejor posicionado en la carrera interna del PSOE. Su acreditada experiencia política, alabada dentro del partido, podría verse menoscabada por posibles nuevos problemas de salud que podrían obligarlo a apartarse del poder.
Una preocupación que desde hace tiempo recorre los pasillos de Ferraz: la juventud del candidato. Fuentes del partido indican que son muchos los partidarios de apostar por una cara nueva, menos 'quemada', aunque con menos experiencia. Y la enfermedad de Rubalcaba podría haberle facilitado las cosas a estos.
La erosión de su figura provocada estos días, y la tardanza de Zapatero en anunciar su salida, favorecen al nombre que cada vez suena con más fuerza: Carmen Chacón. La candidatura de la ministra de Defensa ha cobrado fuerza en el último mes a una velocidad increíble. Es la opción defendida por el sector no continuista, el llamado no alineado que apuesta por la renovación y el cambio en el partido.
Y es que según algunos miembros de Ferraz, hay una "especie de querencia generacional". "Los más jóvenes no quieren que vuelva el felipismo", aseguran.
"Saben que van a perder"
Sin embargo, desde el partido son cautos y ni los indignados por Rubalcaba ni los partidarios de Chacón se "entusiasman". "No hay una alineación entusiasta con nadie, saben que van a perder", han asegurado.