Madrid, 3 ago (EFE).- El coordinador de Economía del PP, Cristóbal Montoro, valoró hoy el "buen dato" de la caída del número de desempleados en julio, pero advirtió de que esa bajada "obedece a la campaña de verano" e hizo un llamamiento a los grupos políticos para hacer una reforma laboral coherente que frene el paro.
Así se manifestó en rueda de prensa, después de que el Ministerio de Trabajo informara hoy de que el desempleo registrado en los Servicios Públicos de Empleo bajó en julio en 73.790 parados respecto al mes anterior.
Montoro advirtió de que el problema del desempleo "sigue ahí" y supone la "peor cara" de la crisis, que sufren sobre todo los jóvenes.
En su opinión, la elevada tasa de paro es "una amenaza" para la recuperación de la economía y para la financiación del Estado, "que no puede atender correctamente algunos servicios públicos, como podría hacerlo, si no tuviera tal carga de parados".
Para el PP la única manera de corregir esta situación es con reformas estructurales y por ello hizo un llamamiento a la responsabilidad de los grupos políticos, para conseguir una reforma laboral "compensada, coherente y ordenada" que no sólo tenga el objetivo de facilitar el despido por unas causas económicas que consideró de "muy dudoso efecto" en la práctica.
No obstante, Montoro se mostró escéptico con el éxito de su llamamiento a la negociación en lo que al Gobierno respecta, puesto que no contó con el PP en la redacción del decreto ley ni tampoco está atendiendo ahora sus enmiendas presentadas al texto.
Por esta razón, el PP volverá a presentar en el trámite de la norma en el Senado las 71 enmiendas que ya fueron rechazadas en el Congreso.
A este respecto, recordó que el trámite está abierto y conminó al Gobierno a que introduzca enmiendas, en lugar de lanzar globos sondas sobre si va a retirar el subsidio a los parados que no acepten puestos de trabajo o de anunciar la futura reforma de las políticas activas de empleo.