Política

Los ciudadanos exigen la paralización de los derribos en el Cabanyal y denuncian la "brutalidad"

Valencia, 9 abr (EFE).- Miles de personas se han concentrado esta tarde en Valencia ante la Delegación del Gobierno para exigir la paralización de los derribos en el barrio del Cabanyal y denunciar la "brutalidad" de los cuerpos policiales hacia los vecinos que se congregaron "pacíficamente" para evitar la demolición de las viviendas.

La concentración, convocada por Esquerra Unida (EU) y a la que se han sumado partidos políticos de la oposición y diferentes asociaciones vecinales, ha hecho un recorrido hasta el Ayuntamiento de Valencia, para denunciar ante el mismo el "menosprecio absoluto hacia la legalidad vigente" en el que a su juicio incurre el gobierno municipal del PP.

El portavoz de EU Amadeu Sanchis ha leído un manifiesto en el que critica al Ayuntamiento por haber comenzado a derribar desde el pasado martes "una serie de inmuebles protegidos" desobedeciendo la orden ministerial que ordeno paralizar los derribos y "situándose, una vez más, a la cabeza del expolio" del patrimonio valenciano.

Según este manifiesto, lo que está haciendo el PP con este barrio "es de una gravedad extrema", puesto que ha decidido "continuar hacia delante caiga quien caiga" y "no tiene ningún problema en marginar y degradar deliberadamente la zona ".

"El PP ha cruzado la peligrosa línea que separa la democracia del totalitarismo. La contundencia empleada por la Policía Local contra cargos públicos de diferentes fuerzas democráticas, así como contra vecinos que intentaban impedir pacíficamente el derribo de un inmueble se ha convertido en un hecho inédito de nuestra democracia", lamenta el documento.

En este sentido, también denuncia y condena la "actitud" del Cuerpo Nacional de Policía, a quien responsabiliza de la "violencia" de los altercados que se han registrado esta semana.

Fueron sus agentes, asegura, los que cargaron de una forma "salvaje" y "sin ninguna provocación previa" de las personas que se congregaron "pacíficamente" para evitar los derribos.

Ante esta situación, exige la "inmediata dimisión" del delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ricardo Peralta, y la del concejal de Seguridad Ciudadana Miquel Domínguez, además de que las dos personas que fueron detenidas en los disturbios "queden sin ningún cargo en contra".

Los asistentes a la concentración, en la que ha habido numerosa presencia policial, han acusado a la alcaldesa de Valencia de "culpable" y a Peralta de "responsable".

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