El vicepresidente del Govern, Josep-Lluís Carod Rovira, considera que "después de 32 años de democracia en España todavía existe alergia a la diversidad cultural entre la opinión pública" y ha defendido las inversiones en cultura, "fácilmente atacables en tiempos de crisis".
El vicepresidente del Govern piensa que si bien entre la clase política es menos frecuente, entre la opinión pública española existen todavía reticencias a aceptar la diversidad cultural y lingüística del Estado y hay gente que la considera "un estorbo en lugar de considerarlo un patrimonio de todos".
Carod, que ha ofrecido hoy una ponencia titulada "La gobernanza de la diplomacia cultural: prioridades para Cataluña" en el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona, ha calificado de "demagógicas y populistas" las declaraciones de quienes critican las inversiones culturales en una situación de crisis económica.
En referencia a las relaciones con organismos culturales del Estado, Carod ha reconocido que en ocasiones son "complicadas" y ha anunciado que se está estudiando la incorporación del Instituto Ramon Llull a la Red Europea de Institutos Nacionales de Cultura en la que ya figura el Instituto Cervantes.
El vicepresidente ha defendido los esfuerzos realizados para asegurar la presencia de la cultura catalana en eventos como la Bienal de Venecia o la Feria del Libro de Fráncfort por la "influencia positiva" que este tipo de actos tienen sobre la imagen de Cataluña y considera que las oportunidades para aprender catalán en cualquier lugar del mundo son superiores a las de algunos idiomas oficiales europeos