El presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, Juan Luis Ibarra, advirtió ayer que la mejora experimentada por la Justicia vasca en el año 2012 supondrá un punto de inflexión y el inicio de un descenso de la misma debido a los recortes con la falta de refuerzo de personal y a la ley de tasas. En la presentación de la Memoria Judicial 2012 constató la secuencia de cinco años de mejora en la calidad y la eficiencia pero 'nos tememos que 2012 va a ser el final del periodo'.
Juan Luis Ibarra cuestiona que el descargo de trabajo de los juzgados de los Contencioso Administrativo debido a la ley que grava el acceso a las demandas y recursos vaya a suponer una mejora en la eficiencia y la calidad de los juzgados, a su juicio será una menor tramitación de asuntos, pero desde el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco entienden que calidada es otra cosa.
Euskadi tiene una tasa de ligitiosidad baja, 134 litigios por cada 1.000 habitantes. En 2012 ingresaron en los juzgados vascos 294.141 asuntos (170.000 menos que un año antes) y por ahora los juzgados vascos resuelven más casos de los que ingresan cada año, de ahí que mejoren los criterios de eficiencia y calidad en 2012. El tiempo de respuesta medio en la Primera Instancia es de 2,9 (con una mejora del 3% en un año) y en Segunda Instancia de 2,2 meses (con una mejor del 14,3%).
Para Ibarra se puede calificar la eficiencia de los juzgados vascos como 'holgadamente en el notable', pero reiteró que esto pude cambiar como consecuencia del gravamen de las tasas, la paralización de la modernización informática y la falta de refuerzo de personal para atender el mayor número de casos que llegan a los juzgados como consecuencia de la crisis (alzamientos hipotecarios, demandas de despidos, concursos de empresas, etc).
En cuanto a la ley de tasas que grava el acceso a la Justicia, especialmente a lo Contencioso Administrativo (en que precisamente predominan los recursos de los ciudadanos contra resoluciones administrativas que consideran injustas), Ibarra destacó la paradoja que en estadísticas se va a producir una mejora en el descenso de litigios, por tanto de un mayor índice de 'eficiencia' en la resolución de casos, pero a su juicio esa variable estadística no representa a la verdadera eficiencia y la calidad de la justicia. 'En la Administración de Justicia no hay milagros, algunas medidas puede tener este efecto negativo'.
En encarecimiento de la Justicia que implica la entrada en vigor de la Ley de Tasas ya ha supuesto un descenso del 30% en el número de asuntos que llega a los juzgados, lo que para Ibarra es 'preocupante' y 'eso no es bueno para el Estado de Derecho'.
Por el contrario, los efectos de la crisis ha supuesto un aumento de más del 20% en los asuntos que llegan a los Juzgados de lo Social. La presidenta de la Sala de lo Social del TSJPV, Garbiñe Biurrun, indicó que la Jurisdicción Social 'es la gran pagana de la crisis, como consecuencia del manifiesto deterioro de las condiciones de trabajo y de la regulación que viene dada por la Reforma Laboral, no sólo la del 2012, sino también por la nueva Ley reguladora de Jurisdicción Social que entró en vigor en diciembre de 2011'. La magistrada dijo que todo ello llevará a que los Juzgados de lo Social registrarán a lo largo del año 1.400 asuntos anuales por cada órgano jurisdiccional, lo que supone 'el doble del estándar previsto por el CGPJ, que ronda los 680-800 asuntos'.
En materia de renovación informática de los juzgados, Ibarra calificó la situación de 'bache' y mostró su 'preocupación' ante los recortes presupuestarios que no parecen augurar que se vaya a apostar por continuar con la modernización de los equipos. Tras finalizar el Pacto de Estado de Modenización de la Justicia 2001-2011 'la modernización de la Justicia se ha colapsado'.
Las peticiones del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco son que se le dote de 12 nuevas unidades judiciales, especialmente para reforzar la jurisdicción Social, que se se ha visto saturada de demandas de despidos y también de concursos de empresas. También califican de urgente el traslado del Juzgado de los Social desplazado a Eibar, para su retorno a San Sebastián, por criterios de eficiencias
El reconocimiento social hacia los jueces
Respecto de la percepción que la sociedad, los ciudadanos, tienen de los jueces y de la Justicia, en base a la encuesta de Metroscopia, ha mejorado mucho, casi 22 puntos en un año, lo que Ibarra atribuyó al papel que han jugado los jueces, magistrados, en denunciar la situación de las familias sobrendeudadas, afectadas por el paro y que se han visto abocadas al desahuicio de su vivienda habitual. 'Los ciudadano miraron a los jueces como última garantía', tanto en materia de desahucios, como ante la reforma laboral y los despidos.
Por tanto, mostró su satisfacción por la resolución del Tribunal Europeo de Justicia que ha llevado al Gobierno español a cambiar la Ley de Deudores Hipotecarios, en que se permite al juez una tutela efectiva y entrar a juzgar si en los créditos hubo condiciones abusivas o incluso a paralizar ejecuciones hipotecarias.
Ibarra hizo un claro agradecimiento a la labor que están desarrollado los jueces, especialmente los de Primera Instancia, que son los que se encuentran a diario con los problemas sociales. En este sentido, quiso especialmente poner en valor el trabajo del juez tipo, cuyo perfil se asemeja más a: 'una mujer, menor de 40 años, que no aparece en los medios de comunicación, que tiene saturación de trabajo y que está dando una respuesta que la sociedad demanda'. Para después añadir que hoy en día 'la independencia del Poder Judicial se sustenta en mujeres jóvenes, no con discursos sociales, sino jurisdiccionales'.