El número de nuevos concurso judiciales tramitados en los 4 Juzgados de lo Mercantil del País Vasco ascendió a 2.935, pero con la infraestructura actual los juzgados sólo pudieron resolver 2.441 (+9,83%), por lo que los asuntos pendientes para 2012 sumaron 2.223, cifra superior a la que se arrastraba del año 2010 que fueron 1.715.
Durante la presentación de la Memoria del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, su presidente, Juan Luis Ibarra, reclamó un nuevo juzgado mercantil para el País Vasco y la consolidación como juzgado del actual juez territorial adscrito que se adoptó para reforzar el servicio. La evolución de la crisis económica apunta a que el incremento de empresas que va a concurso (antigua suspensión de pagos y quiebra) continuará durante 2012.
Otro de los reflejos de la crisis en la actividad de la Justicia en el País Vasco ueda patente en el hecho de que 1.566 inmuebles, en su mayoría viviendas y locales comerciales, fueron desalojados por no hacer frente a sus cargas. El 85% de los casos de desalojo han sido viviendas habituales de familias vascas, mientras que el resto han sido locales. Por territorios el mayor número de desahucios se produjo en Vizcaya con 901, seguido de Guipúzcoa, con 344, y de Álava, con 321.
La tasa de litigiosidad vasca es de 135,44 por cada 1.000 habitantes, con una reducción del 4% en el último año, y que coloca a los juzgados vascos entre los más eficientes de España, por debajo de la media en asuntos pendientes y demoras en las resoluciones.
Este número se espera que se reduzca como consecuencia de la reforma de la Ley de Agilización Judicial que agrava las costas y evita las apelaciones para casos asuntos inferiores a valoraciones de 30.000 euros. En total el TSJPV reclama 3 nuevas unidades de juzgado, que en palabras de Juan Luis Ibarra, no les importa si se materializa a través de Juzgados o de plazas de refuerzo, siempre y cuando dispongan de la dotación e infraestructuras necesarias para desarrollar su trabajo.
La imagen pública de los jueces
El presidente del TSJPV, Juan Luis Ibarra, reconoció que el escándalo surgido alredor del presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), 'inequívocamente va a influir negativamente' en la imagen e los jueces, a pesar de que los magistrados y los órganos de gobierno son instituciones separadas en cuanto a condiciones de trabajo.
Ibarra abogó por 'la mayor transparencia' posible en el uso de dinero público y matizó que los jueces, dentro de su función administran muchos fondos, pero no tienen disposición sobre ninguno.
Así mismo defendió con vehemencia la dedicación de los jueces en el País Vasco, ya que aunque su jornada laboral no conlleva fichar ni establecer turnos de 8 horas de trabajo diario, sino que fijan las horas de audiencia, en la práctica dedican mucho más que 40 horas semanales a su trabajo, en que muchos fines de semana dedican a redactar sentencias o a documentarse para los casos. Para reforzar esta afirmación Ibarra destacó que si esto no fuera así hubiera sido imposible que los jueces vascos resolvieran 301.849 casos durante el año 2011.
Una cuestión que preocupa mucho al presidente el TSJPV es el riesgo que corre la calidad de la administración de Justicia si se mantiene durante mucho tiempo la carga de trabajo actual de los jueces. Ibarra no llegó a hablar de sobrecarga, pero si insistió en que los buenos resultados de resolución de casos también esconde una queja de los jueces que reclaman mayor disponibilidad de tiempo para poder documentarse en cada caso y realizar sentencias bien argumentadas. 'Los jueces dicen que necesitan más tiempo para la toma de decisiones y más información', señaló.
Oficina Judicial
Juan Luis Ibarra reconoció que tras las polémicas sobe las renovaciones de los servicios informáticos de los juzgados vascos, las nuevas Oficinas Judiciales han tenido que empezar a trabajar sin el nuevo programa informático anunciado ad hoc. De ahí que éstas nuevas oficinas han arrancado con un sistema que supone sólo la renovación de la plataforma ya existente y tampoco esperan que a corto plazo vaya a variar esta situación. Esto ha hecho que frente a unos años en que la Justicia vasca fue pionera en sus soportes informáticos, en la actualidad ya no lo es.
Femenización de la Justicia
El TSJP constata una clara 'femenización' de sus estructuras al constatar que las nuevas incorporaciones entre jueces y secretarios judiciales son principalmente mujeres. Asó, entre el personal judicial menor de 30 años, el 83,3% son mujeres; en las edades de entre 31-40 años son el 74%; entre 41-50 años el 52,6%; entre 51-60 el 48% y entre 60-70 años el 25%.
