
Gestamp Automoción se ha recuperado por completo de los efectos de la crisis económica y de la crisis que afectó especialmente al sector de automoción en 2008 y 2009 y vuelve a estar en posición inversora y de expansión.
A pesar de que su estrategia de cara al futuro plantea los mayores crecimientos en producción e inversiones en Latinoamérica y Asia, Gestamp Automoción no se olvida de Europa donde tiene previsto invertir hasta 2014 un total de 360 millones, estrategia en la que ha recibido el respaldo del Banco Europeo de Inversiones (BEI) que le ha concedido un crédito de 125 millones, ampliables en otros 50 millones que en este caso se haría con la intermediación del Instituto de Crédito Oficial (ICO).
Una parte destacable de esta inversión se efectuará en España, lo que le proporcionará 51 millones de financiación del BEI.
El proyecto que Gestamp presentó al Banco Europeo de Inversiones se divide en dos partes. Por un lado contempla el desarrollo de actividades de investigación e innovación en aplicaciones metalúrgicas para componentes de automoción con el objetivo de mejorar la eficiencia de los vehículos en consumo de combustible y seguridad pasiva y activa. Estas actuaciones se llevarán acabo en plantas situadas en Hungría, Eslovaquia y Turquía, incluidas dentro de las zonas prioritarias de convergencia para la Unión Europea.
Las otras inversiones irán dirigidas la construcción de nuevas plantas en República Checa y Rumania.
Récord de facturación en 2010
Tras el bache del ejercicio 2009 (único en su historia reciente en que registró un descenso de facturación), en 2010 contabilizó su cifra récord de ingresos al alcanzar los 3.170 millones de euros, con un crecimiento del 55 por ciento.
Así lo puso de manifiesto Francisco Riberas, presidente de Gestamp Automoción en unas jornadas organizadas por el Automotive Intelligence Center (AIC), la asociación APD Zona Norte y PwC.
Este salto de ingresos no responde únicamente a la evolución de sus negocios, también ha influido la incorporación a la compañía del grupo alemán EDSCHA, líder en el segmento de bisagras, que factura unos 500 millones y tiene una plantilla de 3.800 personas.
Con vistas al año en curso la previsión de Gestamp Automoción el elevar sus ingresos hasta los 3.600 millones de euros, para pasar a los 5.200 millones en 2012.
Estas previsiones están realizadas sin tener en cuenta todavía los efectos que tendrá la incorporación de Thyssen-Krupp Metal Forming, grupo que ha adquirido Gestamp, aunque aún está pendiente de la autorización de la Dirección de la Competencia de la Unión Europea. Metal Forming está especializado en la producción de componentes de chasis y estampación en caliente. Este grupo que cuenta con una potente diversificación internacional registró en el ejercicio 2010 un volumen de negocio de 1.100 millones de euros y da empleo directo a 5.700 personas.
Plan Estratégico 2016
El presidente de Gestamp Automoción, Francisco Riveras, explicó en AIC que se están elaborando el Plan Estratégico de la compañía con el horizonte 2016, en el que adelantó que se fijarán como objetivo elevar el volumen de negocio del grupo hasta los 7.000 millones.
En esta estrategia tendrá dos pilares. Por un lado, canalizarán sus nuevas implantación en los países en desarrollo, especialmente en Latinoamérica, Rusia y en Asia, en un dinámica de acercar los centros de producción a los lugares donde crecerá con más fuerza en mercado de consumo de coches. Durante 2010 instalaron 2 plantas en Rusia (donde construyen ahora una tercera) y otras en Argentina, China e India.
Por otro, basarán su desarrollo tecnológico en el acero (reducción de peso y aumentar resistencia), descartando introducirse en las tecnologías las de fibra de carbono por el alto coste económico de materia.
La relación entre constructor y proveedor no puede ser sólo el precio
El presidente de Gestamp Automoción, Francisco Riberas, explica que los cambios del sector, así como la globalización, exigen cambios la relación entre los constructores de vehículos (OEM) y los proveedores de componentes. A su juicio hasta ahora se sustentan con exceso en el factor precio, pero cada vez es más necesaria una colaboración tecnológica y ser capaces de acudir conjuntamente a todas las zonas de producción. Aboga por que llegue a una relación de 'socios a riesgo?, pero manteniendo al estrategia multicliente. 'Habría que pasar de un modelo de relación entre departamentos de compras-ventas, a una relación entre empresas a largo plazo'.