La fiscalía antidopaje del Comité Olímpico Nacional Italiano (CONI) anunció este miércoles que solicitó dos años de suspensión para el ciclista Danilo di Luca, ganador del último Giro, por el "resultado anormal" de un control realizado en una etapa de la prueba en mayo.
"La fiscalía antidopaje ha solicitado que el ciclista Danilo di Luca comparezca ante el juez de última instancia en materia de dopaje en relación con el control anormal" efectuado por sorpresa al término de la 17ª etapa del Giro, informó el CONI en un comunicado.
El CONI explica que pidió esa pena en virtud del artículo 2.2 del Código Mundial Antidopaje, relativo al "consumo o intento de consumo de una sustancia o método prohibido".
Al término de esa etapa de montaña especialmente dura entre Lienz (Austria) y el Monte Zoncolan el 30 de mayo, además de los controles normales que lleva a cabo la Unión Ciclista Internacional, el CONI efectuó unos tests antidopaje por sorpresa a varios corredores italianos por la noche en sus hoteles.
Además de Di Luca, de 32 años, que vestía el maillot rosa de líder, otros tres ciclistas - Eddy Mazzoleni, Riccardo Ricco y Gilberto Simoni - fueron sometidos a esos controles sin previo aviso.
Los análisis de Di Luca revelaron niveles hormonales anormalmente bajos, equivalentes a los de un niño, según había desvelado la prensa, lo cual hacía pensar que el corredor podría haber recibido después de la etapa una perfusión de agua o de suero fisiológico.
Di Luca fue convocado a principios de diciembre por el CONI en Roma para explicarse sobre este asunto y negó haberse sometido a una perfusión.
En octubre, ya fue condenado a una suspensión de tres meses por su implicación en el caso 'Oil for drug' contra varios atletas relacionados con el doctor Carlo Santuccione, un médico sospechoso de prácticas dopantes, sanción que recurrió en diciembre ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS).
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