Coca Cola se encuentra en un mal momento en España debido al ERE de más de 1.250 personas que acaba de comunicar. Su imagen se encuentra debilitada y los ciudadanos parecen dejar de tenerle la simpatía de otras épocas.
Con el miedo a que Pepsi ocupe las mesas de los españoles, la multinacional se ha puesto a trabajar en la búsqueda de un nuevo director de comunicación que sepa gestionar la crisis actual y que consiga que los ciudadanos sigan sintiendo simpatía por la marca.
Pero la tarea no es fácil. Tras la salida del anterior dircom , Carlos Chaguaceda, la empresa ha recibido ya dos negativas para ocupar el cargo. Pero el tiempo corre en contra al agudizarse los problemas y las tensiones entre la plantilla.