THE WALL STREET JOURNAL (EEUU)
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó la semana pasada su octava resolución acerca del programa nuclear de Corea del Norte, y nadie espera que tenga mucho más efecto que sus predecesoras. El régimen de Kim seguirá teniendo divisa extranjera suficiente para importar bienes de primera necesidad. Pero el Gobierno Obama podría usar una parte de las sanciones con gran impacto: impedir las operaciones de todos los bancos que negocian con Corea del Norte a través de los sistemas de compensación de EEUU. Y, primero y principal, debería resucitar la North Korean Activities Group: sin un órgano que persiga el dinero de los Kim, Occidente tiene perdida la batalla.