LES ÉCHOS (FRANCIA)
En el imaginario francés, las pequeñas empresas sufren ante los grandes grupos que se enriquecen siempre. Desde luego, muchas pymes están luchando. Y los gigantes franceses buscan crecimiento fuera cuando no lo encuentran en su país. Endurecen las condiciones a sus proveedores, reducen plantillas, pero no logran grandes beneficios. Si la economía francesa no ha aumentado su producción en los últimos años, las compañías del CAC 40 no han elevado sus ganancias: el año pasado ganaron 53.000 millones de euros, 40.000 menos que en 2007. El tejido productivo se resume en decenas de líderes mundiales, muchas pymes y un gran hueco entre los dos polos, que puede extenderse si las grandes no vuelven al crecimiento.
