THE GUARDIAN (REINO UNIDO)
David Cameron parece arrinconado: el ala euroescéptica de su propio partido pide medidas ultraausteras, mostrando que no han aprendido nada de las derrotas electorales de la semana pasada; y el partido Laborista de David Miliband goza de nuevo crédito tras la victoria de Hollande. Éste ha ganado en Francia haciendo pocas promesas, al estilo de Tony Blair. Pero las palabras que captan el espíritu de los tiempos pueden hablar más alto que las políticas. Europa se duele, pero no funciona. El SPD alemán se ha unido a las protestas de que la austeridad sola no basta; Mario Monti no es el único que pide un plan de crecimiento. ¿Dónde queda Cameron? Él y Osborne pueden quedar como los últimos austeros que se negaron a aprender la lección de los años 30: las crisis necesitan gasto.
