El ya presidente del Gobierno no sólo ha querido respetar escrupulosamente los plazos para tomar las riendas del próximo Ejecutivo. Normalmente, el nuevo inquilino de la Moncloa suele llamar al menos unos días antes para informarse sobre los planos y los muebles que pueda precisar en su residencia para toda la legislatura. Así fue el caso de José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero. Sin embargo, ha llamado la atención que Mariano Rajoy no haya seguido tal costumbre y se haya despreocupado por la inminente mudanza.