<i>ILTALEHTI (FINLANDIA)</I>
Evidentemente, el Banco Central no prevé observar impasible cómo la eurozona se precipita a toda velocidad contra un muro. Si el BCE se concentrara sólo en el control de la inflación, la entidad pronto no tendrá nada más que defender.
Los tomadores de decisiones de la eurozona deben llegar a resoluciones políticas profundas. Después, el BCE podría disparar toda su artillería para rescatar la eurozona. El euro se encuentra en juego, y muchos se preparan para el resquebrajamiento de la eurozona.
Pero también es muy probable que el euro se mantenga en pie. Sólo que ello presupone que las decisiones políticas se armonicen con las medidas del BCE. Es obvio que Draghi intenta lograr precisamente eso.