
Gran semana para los compradores, que se recuperaron fácilmente de la presión que ejercieron los bajistas.
Gran semana para los compradores, que se recuperaron fácilmente de la presión que ejercieron los bajistas en los primeros de estos muy intensos nuevos cinco días de mercado. Todo junto, para lo que conviene tener presente el impresionante fallo bajista del mercado norteamericano de renta variable en la zona de mínimos marcada en agosto, parece servir para dar continuidad a los patrones de tipo envolvente con los que los toros habían envuelto a los osos en Europa en la semana anterior, y que fue el centro argumental de mi última tribuna.
Al cierre semanal, sin embargo, conviene destacar que los precios han alcanzado ya su zona de resistencia esperada. Hasta aquí todo normal y no conviene olvidarlo. No tiene por qué haber más en base a los argumentos que hemos tomado como referencia para considerar probable un rebote a niveles de los 2.000 puntos del EuroStoxx 50. Sin embargo, hay elementos que sugieren una posible continuidad.
Conviene destacar el nivel de extremo pesimismo alcanzado entre los inversores tal y como lo mide Investors Intelligence. Un diferencial entre alcistas y bajistas más allá de los 10 puntos como la que ya tenemos merece un mayor rebote. El VIX es otro elemento a considerar, pues las inmediaciones de los 50 puntos, en que de nuevo se ha producido una fuerte vuelta atrás, se corresponden con niveles sólo superados tras la quiebra de Lehman en los últimos lustros.
Falta, con todo, rematar la faena y que la ruptura sea general y vaya más allá de las primeras dificultades. Para ello parece necesario que la volatilidad haga algo más que fallar en su zona de resistencia, por lo que deberán perderse los 35 puntos del VIX, su primer soporte. Resulta necesaria también la colaboración de las principales referencias de renta fija, siendo especialmente necesario ver al futuro del EuroBund de vencimiento diciembre bajo las 135 figuras.
Y por supuesto hará falta que empiece a caer alguna resistencia más en la renta variable. Para ser creíble, la llamativa ruptura alcista de primeras resistencias del EuroStoxx 50 debe ser seguida por el Dax alemán y el Ibex 35.