Dos de los principales bancos griegos, Alpha Bank y Eurobank, se fusionan para crear la mayor entidad del país. Juntos esperan generar sinergias por valor de 2.000 millones al tiempo que se anotan más de 1.000 millones en pérdidas causadas por la deuda gubernamental helena.
Y un fondo catarí suscribirá 1.750 millones en emisiones al objeto de quedarse con el 17 por ciento del grupo. Cierto que ya tenía un 4 por ciento de Alpha, pero esta inversión podría unirse a la de Buffett en BoA para concluir que estos momentos son muy distintos de la incertidumbre de 2008.
Ahora hay inversores dispuestos a encontrar oportunidades en un sector financiero más preparado. Esta vez existe cierto margen para que se propicien soluciones privadas que disipen los miedos sobre la banca.