Un pequeño grupo de accionistas vive atrapado en Amadeus, pero la tecnológica sigue sin resolver su situación. Éstos proceden de Amadeus IT Group, excluida del mercado tras su adquisición por parte de WAM Adquisition, en 2005.
Ésta última, renombrada después Amadeus IT Holding, es la sociedad que ahora cotiza. No así la matriz original, reducida a un limbo que deja presos a los minoritarios que no vendieron.
El remate del esperpento es que este colectivo ni cobra dividendo ni puede operar con sus títulos en el mercado.
La cúpula de la proveedora tecnológica de la industria del viaje debe dar una solución a este grupo a la mayor brevedad, fijando el mecanismo, precios y remuneraciones que se percibirá al abandonar su estrambótica tierra de nadie.