El ministro Blanco ha comunicado a los promotores que comenzará un road show para recuperar la inversión extranjera. Afirma que quiere acabar con la inseguridad jurídica provocada por la Ley de Costas, los casos de corrupción o la falta de financiación de proyectos.
Incluso modificará la Ley del Suelo, porque los ayuntamientos están expropiando a precio de suelo rural terrenos que habían quedado sin urbanizar. La gira no parece mala idea para intentar colocar al menos una parte del stock de la costa.
Sin embargo, a buenas horas cambia el Gobierno el discurso tras haber demonizado la especulación con el ladrillo y provocado en buena medida esa huida de compradores. Sólo había que leer una prensa extranjera plagada de historias sobre esta inseguridad jurídica.