Aún no parece totalmente allanado el camino hacia la integración de Serbia en la UE, pero se abre por primera vez una perspectiva concreta, impensable hace sólo unas semanas.
Los ministros de Exteriores de la UE han decidido con voto unánime someter al examen de la Comisión la petición de adhesión de Serbia, sin tramitar desde diciembre de 2009. Cada paso adelante en las negociaciones entre la Unión y Belgrado estará condicionado por los progresos realizados por esta última en la cooperación con el Tribunal de La Haya, que serán "valorados por unanimidad".
Gran satisfacción en Italia, que desde siempre ha sido uno de los más convencidos patrocinadores de esta adhesión. El presidente serbio indica que el país "satisfará completamente sus obligaciones internacionales y el Gobierno continuará buscando a Mladic [presunto criminal de guerra serbo-bosnio y prófugo de la justicia internacional] con todos los medios de que dispone".
Por otra parte, "el esfuerzo de Serbia para abrir el diálogo con Kosovo es un acto que debería ser recompensado", según el presidente del Consejo de Exteriores de la UE. Y es que Europa está deseosa de normalización en la región eternamente telúrica de los Balcanes. Si no hay muchos escollos, las negociaciones de adhesión podrían comenzar a partir de 2012.
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