Un día antes de que presente su plan quinquenal, Fiat demuestra que ya está pensando en el futuro. Apuesta por el nombramiento de John Elkann, el nieto del patriarca Gianni Agnelli, como presidente. De 34 años, el nuevo número uno de la marca italiana tiene por delante el reto de enfrentarse a un sector en plena reestructuración. Pero no va a caminar solo.
A su lado continuará Sergio Marchionne, el artífice del salvamento de la compañía cuando estaba al borde la quiebra a principios de la década. Ellos han comenzado antes que la mayoría el proceso de depuración. Su asociación con Chrysler le da pie para crecer en EEUU. Y probablemente busquen un socio indio para extenderse por Asia. Aún deben seguir renovando la marca con tecnología líder e integrar bien las nuevas alianzas.