El presidente de la Federación de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, Lorenzo Amor, defendió ayer en el Ágora de elEconomista que las cantidades que el ICO baraja conceder como préstamos directos son insuficientes para solucionar el estrangulamiento financiero.
Por mucho que se redibuje, este resucitado sucedáneo de banco público nunca tendrá la capacidad de suplantar al sistema financiero sin incurrir en un serio riesgo para el conjunto de la economía. Amor acertó al decir: "¿Es posible que sólo el 23 por ciento de los autónomos hayan recibido crédito y, por tanto, sean viables y solventes?". Parece excesivo, máxime cuando los préstamos a la Administración y los superiores al millón de euros aumentan. Las entidades deben sanearse cuanto antes para cumplir con su función.