Isidro Fainé, presidente de la CECA y de la Fundación Bancaria 'la Caixa', ha sido reelegido como presidente del Instituto Mundial de Cajas de Ahorros y Bancos Minoristas (WSBI, por sus siglas en inglés), durante la 28ª Asamblea que se ha celebrado en París.
Los miembros de la Asamblea de esta institución, que representa los intereses de 6.500 cajas de ahorros y bancos minoristas en más de 60 países, han reelegido por unanimidad a Isidro Fainé al frente de la institución para los próximos tres años. El alemán Peter Simon será el consejero delegado de la entidad para este periodo.
Forman parte 6.500 cajas de ahorro y bancos minoristas de más de 60 países
Entre las líneas prioritarias de trabajo esbozadas para el futuro se encuentran la inclusión financiera, la promoción de las finanzas sostenibles, el intercambio de mejores prácticas en la implementación del nuevo marco de solvencia Basilea IV, y la innovación, buscando en la digitalización una herramienta para mejorar la cercanía al cliente.
Durante el primer mandato de Isidro Fainé como presidente (2018 – 2021), la organización se ha centrado en los siguientes aspectos:
La promoción de la inclusión financiera: WSBI ha incrementando el número de personas bancarizadas en 329 millones de 2014 a 2020. Además, se ha consolidado la colaboración con la Mastercard Foundation, que ha permitido poner en marcha iniciativas como Scale2Save, focalizada en el fomento del ahorro en África. También, se ha iniciado una colaboración con el proyecto de alfabetización digital Profuturo para impulsar la educación financiera en países en vías de desarrollo.
Por otro lado, ha habido un incremento de la interlocución con los organismos internacionales. WSBI ha puesto el foco en promover frente a los reguladores medidas económicas, fiscales y sociales que favorezcan un marco flexible que facilite la salida de la crisis y la atención a las nuevas demandas en el marco de la misma.
Por último, destaca el fomento de la colaboración entre los miembros. En el contexto de la crisis del coronavirus han incrementado el intercambio de mejores prácticas para hacer frente a las necesidades financieras de todo tipo de colectivos, instituciones, grandes empresas, pymes y familias.
"En los próximos años, tendremos que abordar importantes retos: la recuperación económica, el incremento de la desigualdad, los retos demográficos que pondrán presión sobre los recursos naturales, el cambio climático y la sostenibilidad. Los miembros tienen en su ADN la vocación de ayudar a los más vulnerables y el fortalecimiento de la comunidad. Las contribuciones sociales de los miembros ascienden a un total de 1.800 millones de dólares anuales para luchar contra la pobreza y la exclusión social", ha señalado Isidro Fainé.