La exministra de Agricultura, Cecilia López Montaño, reveló los diez principales cuellos de botella del campo colombiano, en lo que denominó un primer avance del informe de la Misión Rural.
De acuerdo con la experta, quien participa en el equipo de la Misión Rural que lidera el exministro José Antonio Ocampo, los siguientes son esos primeros diez hallazgos de la investigación:
? Envejecimiento de la población rural. Llama la atención que existe una notoria disminución de mujeres y jóvenes en el campo, principalmente por razones de migración hacia las ciudades.
? Baja remuneración laboral. En opinión de la exministra, lo común es encontrar personas que apenas devengan medio salario mínimo, es decir, no se está cumpliendo con las leyes laborales.
? Problemas de acceso a la tierra. Allí se explica que las dos terceras partes de la población campesina no tienen acceso a la tierra productiva. En este mismo ítem se percibe una política desordenada. Hay mucha concentración de la propiedad de la tierra
? Bajo rendimiento de la producción. Es decir, los recursos que se invierten en actividades agrícolas no se compensan con las ganancias que se logran obtener.
? Altos costos de producción. Estos se reflejan no solo en los costos de los equipos e insumos, sino también en la dificultad para adquirirlos. Carencia de oferta de bienes públicos.
? Problemas de comercialización, pues no existen ni los canales ni estrategias comerciales eficientes.
? Falta de financiación a pequeños productores. Aún no se logra consolidar un adecuado financiamiento a este sector del campo.
? Carencia de seguros agropecuarios. Las actividades del campo no son atractivas para las compañías de seguros.
? Una nueva definición de ruralidad en Colombia.
? Alejamiento de la producción rural. Cada vez más la producción agropecuaria se aleja, en buena medida por la prevalencia de políticas que fomentan la expansión urbana.
De acuerdo con la exministra, ahora que el sector agropecuario está en el centro de la discusión nacional, tiene que haber nuevas líneas de acción, que deberían tener como punto de partida una planeación del sector rural a por lo menos 20 años.