Fumata blanca. Pocos días antes de que finalice el ejercicio fiscal del Grupo Eroski (el 31 de enero), su presidente, Agustín Markaida, ha logrado su objetivo de refinanciar parte del endeudamiento del grupo, el generado por la compra de Caprabo.
Así lo ha informado hoy en un hecho relevante a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), después de comunicar ayer el acuerdo alcanzado con las 22 entidades financieras. En virtud del pacto alcanzado, se retrasa tres años el vencimiento de sus créditos previstos para 2014, hasta 2017.
"La deuda afectada por la reestructuración ve modificados su calendario de amortización y vencimiento final, que pasa a enero de 2017, consolidándose la estructura de financiación a largo plazo", explica el grupo en su nota al regulador bursátil.
Desde la compañía indican que "el acuerdo en cuestión sustituye al anterior de diciembre de 2009, que abarcaba hasta enero de 2014". Además, aseguran que en los últimos años han logrado rebajar su deuda en más de 1.000 millones, lo que supone "un tercio del total".
Un año de negociaciones
Las negociaciones para la refinanciación de la deuda de Eroski han llevado casi un año y afectan a un crédito sindicado, suscrito en 2007 derivado de la compra de la cadena catalana Caprabo.
La cuantía de la deuda pendiente de dicho crédito ascendía en julio, cuando se difundieron las últimas cuentas oficiales, a 1.839 millones de euros. Además, con motivo de dichas negociaciones se acordó aplazar los vencimientos previsto en 2012, que implicó aplazar 369 millones de pasivos financieros corrientes.
Según aparecía en las últimas cuentas de Eroski, en las de de julio, el endeudamiento total del grupo se situaba en 2.648 millones.