MADRID (Reuters) - La presidenta del Partido Popular vasco, María San Gil, sufrió el martes un intento de agresión en la Universidad de Santiago de Compostela, donde iba a pronunciar un discurso, por un grupo de estudiantes radicales.
En el forcejeo entre los estudiantes y los escoltas de la dirigente popular, uno de estos últimos resultó herido en una mano y otros dos sufrieroncontusiones leves, según medios.
Los hechos ocurrieron por la mañana, cuando San Gil entraba en el recinto universitario donde iba a pronunciar una conferencia. En un vestíbulo, ungrupo de unos 15 estudiantes prorrumpió en insultos contra la líder del PP vasco como "fascista", "vosotros sois los terroristas", y gritando "española".
Algunos llevaban pancartas que decían "no a la ilegalización de las ideas" y tocaban silbatos, mientras otros se acercaron para intentar agredirla yfueron repelidos entre empujones por los escoltas y los servicios de seguridad.
El PP condenó lo ocurrido, y su secretario ejecutivo de Libertades Públicas, Seguridad y Justicia, Ignacio Astarloa, las calificó en un comunicado de"salvajada y una obra de auténticos nazis que no respetan a las personas, las libertades, ni las reglas de la convivencia civilizada".
Astarloa criticó que se haya atacado" a una mujer, un símbolo de la lucha por la vida, por la paz y por la libertad" y que además haya ocurrido en unauniversidad.
El dirigente del PP denunció "el caldo de cultivo" previo "que se han generado estos cuatro años, se han hecho alianzas con los independentistas másradicales, que hoy se sienten envalentonados".
"Se ha pregonado, promovido y hasta pactado la exclusión del PP y los más radicales se sienten a sus anchas, legitimados para pasar de las palabrasa sus hechos e imponerse a torta limpia".
Los miembros de la Mesa del Parlamento Vasco expresaron su solidaridad con San Gil y en un comunicado señaló que "los insultos y las agresionespadecidos por la parlamentaria vasca y la conducta observada por los agresores son manifestaciones de totalitarismo incompatibles con la democracia yque en nada ayudan a la paz, ni a la convivencia".