
Tic tac, tic tac. El ganador de las elecciones del 20-N, Mariano Rajoy, se ha encerrado en Génova y no despacha: aún sopesa quién debe estar al frente del Ministerio de Economía. El líder popular fortifica Génova 13 a medida que se agotan los dias para dar a conocer la composición de su gabinete y las quinielas: temor general, todos quieren que el político gallego pueda anunciar de primera mano la composición de su Gobierno en el Congreso. Lista: ¿Quién debe ser el ministro de Economía?
"No tengo ni idea. Yo todo lo despacho directamente con el propio Rajoy". Esta frase de la aún vicepresidenta y ministra de Economía, Elena Salgado, resume la aspiración de Rajoy: que nadie filtre el nombre de su delfín económico. Así, el popular gestiona el traspaso de poderes directamente con Salgado para evitar conjeturas.
Trío de banqueros
Sin embargo, varios nombres han saltado ya a la palestra. Como muestra un botón: al político gallego le han propuesto hace pocos días que sea un banquero quien ocupe la cartera de Economía o una eventual Vicepresidencia Económica.
La sugerencia no hacia referencia a Rodrigo Rato, el ahora presidente de Bankia y uno de los candidatos, sino que señalaba a un banquero sin experiencia en la gestión gubernamental, tal y como ha podido saber EcoDiario.es. El presidente del BBVA, Francisco González, habla inglés y podía ser la equis de esta ecuación.
Manuel Pizarro, a pesar de su desencuentro tras las elecciones de 2008, también cuenta con probabilidades. Sin embargo, Cristobal Montoro, el coordinador económico del PP, parece el mejor posicionado para quedarse con la cartera.
De hecho, el propio Rajoy ya prometió a Montoro en 2008 que, si llegaba a la Presidencia del Gobierno, contaría con él en su Gabinete. Entonces no pudo ser, pues los socialistas se alzaron de nuevo con la mayoría, aunque simple, pero la promesa se mantuvo en pie.
De presentarse una tercera ocasión, el portavoz económico se sentaría de nuevo en el Consejo de Ministros, aseguró el líder del PP.
Entre Bruselas y los técnicos
Ahora mismo una de las opciones con más fuerza es el desembarco, desde Bruselas, del eurodiputado popular José Manuel García-Margallo, un hombre muy próximo a Rajoy. Aunque algo gris, el vicepresidente de la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo sería un paladín de lujo para avanzar en las relaciones con el eje Merkozy.
Peor colocados, tecnócratas como Fernando Bécquer, Jaime Caruana y José Manuel González Páramo podrían dar la sorpresa.