
Subaru se estrena en una nueva categoría, la de los vehículos eléctricos, tras pasar por una etapa previa de hibridación suave en sus modelos. El Solterra, fruto de la colaboración con Toyota, aporta la experiencia de la marca japonesa en materia de tracción y comportamiento dinámico.
Con unas dimensiones interesantes, 4,69 m de largo, 1,86 de ancho y 1,65 de alto, el nuevo Solterra comparte multitud de órganos con el Toyota bZ4X y el Lexus RZ 450e, todos ellos basados en la plataforma e-TNGA, si bien la parte dedicada a la tracción ha sido específicamente desarrollada por Subaru. Además, sus cotas para circular fuera de carretera son especialmente significativas, pues anuncia una altura libre al suelo de 21 cm, un ángulo de entrada de 18,2º y uno de salida de 25,4º.
La nueva plataforma permite la adaptación de uno o dos motores, uno en cada eje, aunque Subaru ha optado por ofrecer inicialmente la variante equipada con dos unidades eléctricas. Así, los dos motores que incorpora son iguales –de 109 CV cada uno-, lo que permite lograr una potencia combinada de 218 CV.
Cuenta con tres modos de funcionamiento, Eco, Normal y Power, que modifican los parámetros de entrega de potencia y sistema de tracción X-Mode AWD, que permite regular la distribución de fuerza entre los ejes, enviando el par necesario para mejorar la adherencia cuando se circula por terrenos complicados, como arena, nieve o barro. Además, ofrece sistema Grip Control para estabilizar la velocidad en descensos pronunciados.
También dispone de un práctico sistema de levas en el volante para activar la frenada regenerativa en cuatro diferentes etapas y un dispositivo S-Pedal para facilitar la conducción sin necesidad de actuar sobre el pedal del freno en la mayoría de las situaciones.
Gran autonomía
El nuevo Solterra, que cuenta con una única opción de batería de 71,4 kWh y 96 celdas refrigeradas, promete una autonomía de hasta 466 km en ciclo combinado WLTP y de hasta 610 km en ciclo urbano y ofrece una garantía del 90% de capacidad de batería pasados 10 años. Homologa un consumo medio de 16,0 kWh/100 km y promete una velocidad máxima de 160 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h en 6,9 segundos.
Permite cargar la batería en corriente alterna a un máximo de 6,6 kW, aunque en la versión 2023 ya admitirá carga trifásica a 11 kW. Para cargas rápidas en corriente continua la potencia máxima que puede absorber es de 150 kW, lo que facilita recargar del 20 al 80 por ciento en unos 17 minutos.
Interior amplio y diáfano
El habitáculo es amplio y se encuentra muy despejado, pues el diseño de todos los elementos se ha enfocado en procurar un ambiente relajado. El puesto de conducción, especialmente cómodo, cuenta con la instrumentación principal situada en la parte superior, una consola central con pantalla de 12,3 pulgadas adicional en la que se sitúan los principales mandos de control y un cargador inalámbrico para smartphones. Llama la atención que no disponga de guantera en el salpicadero, aunque sí incluye diversos huecos amplios repartidos por el habitáculo para depositar objetos.
Los respaldos de los asientos posteriores cuentan con sistema de inclinación en dos posiciones y un maletero de 421 litros más un hueco inferior de 31 litros, lo que totaliza 452 litros de capacidad.
Muchos elementos de seguridad
Como en el resto de modelos de la marca, los dispositivos orientados a mejorar la seguridad y las ayudas a la conducción son una prioridad. Así, se incluyen elementos como el control de crucero dinámico, alerta de salida de carril, sistema de frenada de emergencia, dispositivo de reconocimiento de señales, sensor de detección de tráfico trasero y lateral, etc.
Aún no se han comunicado los precios oficiales del modelo, aunque sí sabemos que la variante más alta de gama contará con llantas de 20 pulgadas, asientos de cuero con regulación eléctrica y techo solar panorámico.