
El selectivo arrancó la sesión con ganancias pero éstas fueron desapareciendo con el trancurso de los minutos para convertirse en descensos: el Ibex 35 tocó máximos del día en 9.138,20 puntos y ahora incluso ha llegado a perder los 9.000. Los alcistas tendrán que emplearse a fondo para volver a tomar la iniciativa en esta jornada semifestiva y escaso volumen de negociación.
"El Ibex vive una nueva jornada de pérdidas en las que le da la espalda a las ganancias del resto de Europa. Y es que a diferencia de lo acontecido con las plazas europeas, el Ibex 35 se ha mantenido muy fuerte y lejos de zonas de soporte últimamente. Las cesiones parecen confirmar que el Ibex 35 pierde la base de una posible pauta de recuperación en cuña, lo que en principio sugiere un escenario a corto plazo más negativo que el de hace algunas algunas jornadas", señalaba Carlos Doblado desde Bolságora.
Los mercados europeos observan en la distancia lo que sucedió el viernes en Wall Street, donde hubo poca historia que contar. El Dow Jones avanzó un 0,56%, el S&P 500 un 0,54% y el Nasdaq un 0,35%.
Hoy, el índice Nikkei repuntó ligeramente por el avance de algunas aseguradoras ante los rumores de fusión de tres empresas del sector, aunque las pérdidas de grandes exportadores como Canon repercutieron en el mercado. En concreto, el indicador nipón terminó la sesión con un alza de 7,6 puntos a 8.747,1 tras alcanzar un máximo intradía de 8.763,7.
Los inversores tendrán hoy muy pocas referencias económicas. En Europa, tan sólo destaca el dato definitivo del Producto Interior Bruto (PIB) de Francia en el tercer trimestre del año, que subió un 0,6% en tasa interanual. En Estados Unidos, no se conocerá ningún dato.
Corrientes vendedoras y compradoras
Los analistas de Link Securities consideran que a pesar de la poca actividad que habrá en los mercados, en los días que restan de ejercicio se podrán observar dos fuerzas contrapuestas. "Por un lado, una corriente vendedora generada por los inversores que se decanten por realizar pérdidas en aras de aprovecharlas con fines fiscales, evidentemente los menos, y otra compradora, liderada por los inversores institucionales y por las propias compañías cotizadas que intentarán maquillar, en lo posible, las cotizaciones para cerrar de la mejor forma posible el año", explican.
Estos expertos no esperan que ninguna de las dos corrientes sea "lo suficientemente fuerte como para modificar sustancialmente los precios en estas últimas sesiones, que entendemos serán de transición, a la espera de que muchos inversores se decidan por reorganizar sus carteras a comienzos del ejercicio 2009".