
Londres, 22 oct (EFE).- La Autoridad de los Servicios Financieros (FSA, en inglés) del Reino Unido dejará de exigir la publicación diaria de los derechos para efectuar operaciones de venta al descubierto, con las que los inversores se benefician de la caída de las acciones y que fueron temporalmente prohibidas en septiembre.
La FSA indicó hoy en un comunicado que "no es proporcionado" requerir la publicación diaria de estos derechos cuando se mantengan estables, por lo que limitará la exigencia de publicación a las operaciones que modifiquen la cuantía de estos derechos.
El pasado 18 de septiembre, el regulador financiero prohibió hasta el 16 de enero de 2009 la creación o incremento de ese tipo de transacciones relacionadas con ciertas empresas que cotizan en la Bolsa de Londres.
Los analistas creen que este tipo de operaciones estuvieron detrás de la caída del Halifax Bank of Scotland (HBOS), que le llevó a aceptar una oferta de compra del Lloyds TSB ese mismo día.
Una venta al descubierto se produce cuando un inversor toma prestadas acciones de una empresa, previo pago de una comisión, para venderlas y volver a comprarlas después con la esperanza de que haya bajado el precio, lo que le permite embolsarse la diferencia antes de devolverlas a su propietario.
La FSA obligaba desde el pasado 18 de septiembre a declarar diariamente la posesión de derechos para efectuar esas transacciones cuando supusieran al menos un 0,25 por ciento del capital de las empresas afectadas.
El resto de medidas seguirán en vigor hasta enero, cuando se publicará una revisión completa de este tipo de operaciones.
El director ejecutivo de la FSA, Hector Sants, afirmó el pasado septiembre que, aunque la venta al descubierto es una técnica de "inversión legítima en condiciones normales del mercado", las circunstancias actuales han dado lugar a "mercados alterados".
El regulador indicó que con esta medida pretende prevenir una mayor inestabilidad en el sector financiero.