
Sao Paulo, 10 oct (EFE).- La volatilidad generalizada de los mercados internacionales se extendió hoy a la bolsa de Sao Paulo, que vivió una jornada con intensas sacudidas, para cerrar con una caída del 3,97 por ciento y 35.609 puntos en su índice Ibovespa.
Con el retroceso de hoy el principal indicador del parqué paulistano acumuló su séptimo cierre consecutivo en números rojos, aunque las pérdidas podrían haber sido más acentuadas, ya que la sesión comenzó con un nuevo batacazo, que obligó a suspender los negocios por tercera vez en esta semana.
Minutos después de la apertura, el selectivo brasileño se desplomó por debajo del 10 por ciento, por lo que se volvió a activar el mecanismo de "cortocircuito" que interrumpió la sesión por media hora para calmar los ánimos.
Una hora antes del cierre el selectivo brasileño aún registraba abultadas pérdidas del 8,50 por ciento, pero acabó recuperándose parcialmente gracias al impulso de Wall Street.
El principal parqué estadounidense, que también había caminado en rojo todo el día, amagó con un cierre en positivo por la confianza en las soluciones a la crisis que puedan salir de la reunión del Grupo de los Siete (G7) en Washington.
De este modo, de los 66 títulos que componen el Ibovespa, 53 cerraron en terreno de las pérdidas y trece en positivo, en una sesión en la que cambiaron de manos 5.169.556.774,22 reales (unos 2.234 millones de dólares), en 252.973 operaciones financieras.
La bajada más pronunciada fue registrada por los papeles preferenciales de la petrolera estatal Petrobras, que cayeron el 7,26 por ciento, mientras que las similares de la compañía minera Vale, los segundos más negociados de la jornada, perdieron el 1,01 por ciento.
En el mercado de divisas el real brasileño sucumbió a la volatilidad de los mercados y volvió a la senda de las depreciaciones, para retroceder el 5,27 por ciento frente al dólar estadounidense.
El billete verde cerró vendido a 2,314 reales en el tipo de cambio comercial, pese a los nuevos intentos del Banco Central brasileño de frenar la caída del real.